Capítulo 6: Hace diez años...

Las tres familias llegan a un acuerdo: ir hasta la calle de la Monja y preguntarle a David por qué les ha hecho eso, una proposición sencilla, pero difícil de realizar. Comienzan a andar hasta qué llegan al lugar indicado:

ISABEL: ¿Por qué no vamos a casa?
MARÍA y JUAN: Por qué tenemos que saber una cosa
ISABEL: Vale, ¿pero me la contaréis?
MARÍA y JUAN: Cariño, tú vas a estar presente

Entran por la puerta, se dirigen hasta la habitación de David:

JUAN: David, ¡no hemos podido aguantar la intriga! Cuéntanos por qué has secuestrado a nuestra hija y a la de él, ella, él y ella
DAVID: Ya sabía yo, que me iba a salir todo bien…
DAVID: ¿Queréis que os lo cuente?
MARIO: Hombre, para eso hemos venido
DAVID: Es una historia horrorosa
ANA: ¿Y a ti no te parece una historia horrorosa lo que nosotros hemos pasado?
DAVID: Vosotros teníais la seguridad de que vuestra hija estaba viva, yo no:
Hace diez años, estábamos, mi mujer, mi hijo y yo en casa. Nos íbamos a ir al circo a ver una actuación. Pero mi hijo cayó por las escaleras y se dio en la nuca, terriblemente murió. Entonces mi mujer y yo estuvimos unos cuantos minutos discutiendo hasta que llegamos a un acuerdo: el divorcio. 
Pero mi mujer cayó en las drogas, y murió de una sobredosis de drogas. A mí no me podía ir peor en la vida, entonces decidí pagar con la misma moneda a mucha gente para, así poder ver quién se molestaba en rescatar a sus hijas, y al parecer los únicos qué habéis levantado el culo habéis sido vosotros: María y Juan. A los demás lo único qué os ha llevado a buscar a vuestras hijas ha sido qué vuestros amigos os pidieran ayuda. Increíble, pero cierto.
ANA: Eso no es verdad, nosotros estuvimos un año intentando encontrar a nuesto hijo
DAVID: Pero siempre se recurre a lo mismo: la policía
JUAN: No empecéis, que con una discusión mirar hasta dónde hemos llegado…